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La edad mínima aceptada es de 8 años a bordo con plena responsabilidad de los padres. Para experimentar y apreciar realmente la Antártica, recomendamos que los niños tengan al menos 12-13 años.
Todos los niños deben ser supervisados en todo momento. Los barcos no están equipados con chalecos salvavidas para los niños, el adulto es responsable de tener uno.
Hay algunos peligros a bordo del buque, también en tierra, y no es un lugar para que los niños pequeños jueguen libremente.
Si deseas saber qué rango de edad se requiere para viajar a la Antártica, consulta nuestro artículo sobre este tema: El rango de edad en los viajes a la Antártica.
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